Preparar mantequilla en casa es una tradición que he mantenido por muchos años. Generalmente la preparo en Noviembre para comerla el día de Acción de Gracias. La mantequilla hecha en casa desarrolla un sabor dulce y herbal que no se presenta en la mantequilla que compramos en el supermercado.
Preparar en casa la mantequilla requiere de tiempo pero el resultado es delicioso y como se obtiene bastante mantequilla con un alto nivel de grasa es posible congelarla por varios meses.
Ingredientes:
- 4 tazas de crema
- 1/2 taza de yogurt
- Sal al gusto
Utensilios:
- Frasco de cristal de capacidad de 6 tazas.
- Colador de malla fina.
- Manta de algodón para queso más grande que el colador que usarás.
- Paño de cocina.
Metodo de preparación:
- Combina muy bien el yogur y la crema en un frasco o tazón grande de cristal. Mezcla muy bien estos ingredientes y cúbrelo con una toalla limpia y déjalo fermentar a temperatura ambiente entre 18 a 36 horas. La consistencia que debe tener cuando está listo debe ser espesa y con un sabor ácido.
- Sella el recipiente y colócalo en el refrigerador por unas dos horas.
- Prepara el colador con la manta de algodón, asegurándote de que haya suficiente gasa adicional colgando fuera del colador.y colócalo sobre un tazón grande.
- En el tazón de un procesador de alimentos o en la Kitchenaid bate la crema a alta velocidad hasta que el suero se separe. Este proceso tarda más o menos 11 minutos.
- Vierte lentamente el suero de leche a través del colador con la malla y luego vierte el cuajo de mantequilla. Deja reposar durante 2 minutos, permitiendo que el suero de leche gotee. Reúne los extremos de la gasa hacia arriba y alrededor de la mantequilla, amasando y formando una bola. Gira la gasa y aprieta la bola para extraer la mayor cantidad de suero de leche posible. Te quedará una bola de mantequilla.
- El suero lo puedes guardar para otros usos como en sopas o panes.
- Llena un bol profundo con agua y hielo.
- Coloca la mantequilla en el recipiente con el agua y hielo donde lavarás la mantequilla.
- Continúa exprimiendo la mantequilla, tira el agua que está blanca y agrega más agua fresca y repite unas 4 veces más «el exprimir- tirar el agua- agregar más agua»; si es necesario agrega más hielo. El agua debe quedar clara.
- Coloca la mantequilla sobre un paño de cocina limpio y da golpecitos suaves para eliminar el exceso de humedad. Amasa unas cuantas veces con las manos y secar de nuevo.
- Coloca la mantequilla sobre un plástico y la puedes formar en un cilindro compacto. Envuelvela en plástico y guárdala en el refrigerador hasta el momento de usarla.
